El Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) ha advertido a los beneficiarios de una prestaciones por desempleo que tienen planeado viajar al extranjero de las consecuencias de salir del terrtiorio nacional. Estas normas tienen como objetivo asegurar que los beneficiarios cumplan con sus responsabilidades para poder mantener la integridad del sistema de prestaciones.
Para los ciudadanos españoles que están recibiendo prestaciones contributivas, como el subsidio por desempleo o la Renta Activa de Inserción (RAI), es muy importante entender cómo un viaje al extranjero puede afectar el pago de estos beneficios.
El SEPE ha establecido una serie de regulaciones que son muy estrictas en este sentido, y no cumplir con ellas puede tener consecuencias graves, pudiendo perder cualquier tipo de ayuda.
La ley del SEPE para viajar al extranjero
Según la Ley de Sanciones e Infracciones en el Orden Social, no informar al SEPE sobre un viaje al extranjero puede ser considerado como una falta grave. Es obligatorio comunicar cualquier ausencia que supere los 15 días naturales, ya que esto puede llevar a la suspensión temporal o incluso a la pérdida definitiva del subsidio.
Estas son las consecuencias según la duración del viaje:
- Viajes de más de 15 días: Si el viaje al extranjero es superior a los los 15 días naturales, las prestaciones deben suspenderse, a menos que se haya notificado adecuadamente al SEPE. Este requisito aplica tanto a viajes por motivos personales como profesionales. Si no se cumple esta obligación conlleva el riesgo de perder el derecho al cobro de la prestación.
- Ausencias de un año o más: Los beneficiarios de prestaciones por desempleo que decidan marcharse al extranjero para estudiar, trabajar o participar en acciones de cooperación internacional por un periodo de un año o más perderán dicha prestación. Del mismo modo, aquellos que perciben la RAI y se trasladan fuera del país por seis meses o más con objetivos laborales, de formación o cooperación internacional, también perderían esta ayuda.
- Ausencias menores a 15 días: Sin embargo, los viajes o ausencias inferiores a 15 días naturales por año no afectan el cobro de la prestación, siempre y cuando se cumplan todas las obligaciones y responsabilidades establecidas por el SEPE. Al regresar al país, es obligatorio informar a la oficina de empleo el primer día hábil posterior al retorno.
- Viajes de 15 a 90 días: Si la estancia en el extranjero es de hasta 90 días dentro de cada año, las prestaciones se suspenden durante ese periodo. Es esencial notificar esta salida al SEPE y obtener su autorización previa para evitar sanciones.
Recomendaciones del SEPE
Antes de planificar cualquier viaje al extranjero, los beneficiarios de prestaciones del SEPE deben conocer cuáles son las implicaciones y responsabilidades asociadas. El cumplimiento de la normativa es una garantía para seguir cobrando los pagos y evita inconvenientes legales. Por tanto, es importante mantener una comunicación abierta y oportuna con el SEPE es fundamental para evitar la pérdida de derechos y beneficios económicos importantes.
Es fundamental que aquellos que dependen de estas prestaciones se mantengan informados y sigan las directrices del SEPE al pie de la letra. La transparencia y la comunicación con las autoridades son claves para evitar sanciones y asegurarse de que los derechos económicos no se vean comprometidos.