Hasta ahora, las amas de casa no tenían derecho a cobrar una pensión al no haber realizado un trabajo por el que se hubiera cotizado ni dado de alta en la Seguridad Social.
Las amas de casa, son las personas que más han dedicado la vida a las labores del hogar y al cuidado de su familia. Sim embargo han sido, por mucho tiempo, invisibles en términos de reconocimiento económico. Aunque su labor es más larga que una jornada completa y a menudo más exigente que otros trabajos, no han recibido, ni de cerca, el mismo trato a la hora de poder cobrar una pensión de jubilación.
Esto se debe a que, al no estar dadas de alta en la Seguridad Social, no podían acceder a una pensión contributiva. Pero gracias a una nueva pensión no contributiva del Imserso, esta realidad ha comenzado a cambiar y ahora van a poder cobrar una pensión, eso sí, siempre que cumplan con una serie de condiciones y requisitos.
Condiciones para acceder a la pensión
Este subsidio, gestionado por el Imserso, está destinado a aquellas personas que, aunque no hayan cotizado lo suficiente a lo largo de su vida laboral, cumplen con ciertos requisitos básicos. El primero de ellos es tener al menos 65 años de edad. Además, es imprescindible haber residido en España durante un mínimo de 10 años, y dos de esos años deben ser consecutivos e inmediatamente anteriores a la solicitud de la pensión. Esto garantiza que las personas que han estado en el país y han contribuido de alguna forma, tengan acceso a este beneficio.
El segundo requisito está relacionado con los ingresos personales. Si la persona vive sola, sus ingresos anuales no deben superar los 7.250,60 euros. En caso de vivir con familiares, se establecen diferentes límites de ingresos conjuntos dependiendo del número de personas que convivan en el hogar. Por ejemplo, si son dos personas en casa, los ingresos no deben superar los 12.326,02 euros anuales. Si son tres, el límite es de 17.401,44 euros, y así sucesivamente.
Otros detalles para las amas de casa
Además, esta pensión es incompatible con cualquier otra, como las de invalidez o asistenciales. Esto significa que solo se puede recibir una pensión de este tipo, en caso de cumplir con los requisitos para varias. El importe máximo que pueden recibir las amas de casa que cumplan con estas condiciones es de 517,90 euros al mes, lo que equivale a 7.250,60 euros anuales.
Este avance supone un reconocimiento importante para las amas de casa, que por fin ven un poco de luz en cuanto a su seguridad económica en la etapa de jubilación. Una pequeña victoria que, sin duda, se esperaba desde hace tiempo. Sin embargo, muchos colectivos consideran esta ayuda insuficiente, sobre todo si no se puede compatibilizar con otras ayudas. El objetivo del Gobierno es que, para el próximo año 2027, todas las pensiones estén por encima del umbral de pobreza, para que todas las familias y personas de nuestro país puedan tener una vida digna y no caigan en la pobreza y en la decadencia económica