La Seguridad Social protege a los trabajadores que sufren una incapacidad temporal con una pensión diaria, que deben solicitar con una baja laboral. Gracias a esta prestación, pueden pedir unos días de descanso si lo necesitan por un proceso de enfermedad o lesión a causa de un accidente.
En estos casos, el trabajador debe avisar a la empresa del cese de la actividad de forma temporal. Una vez hecho esto, deberá precisar de profesionales médicos que constaten el estado del trabajador y puedan ofrecerle una solución durante los días de parón laboral.
Cambios importante en la baja laboral
El Real Decreto 1060/2022, del 27 de diciembre, publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE), estableció hace un tiempo una novedad importante que todos debemos conocer. Y es que la solicitud de incapacidad temporal cambiará en referencia a cómo la conocemos hasta ahora.
A partir de ahora, la Seguridad Social modificará el proceso y la evaluación de la baja laboral, con el objetivo de mantener la ayuda diaria con el paso de los años. En este contexto, el trabajador tendrá que acudir a revisiones médicas más continuadas si el proceso de recuperación se alarga en el tiempo.
Además, la Administración busca mejorar el proceso de recuperación del trabajador. Si acude a más revisiones médicas y tiene un control más exhaustivo de su dolencia, será posible que en caso de recuperación, vuelvan antes al trabajo.
Este cambio de la Seguridad Social afectará a ambas partes, trabajador y empresa. Se trata de un ajuste del sistema que beneficia a ambos lados, ya que la vuelta a la empresa hará que siga cobrando su salario habitual y siga desempeñando sus labores diarias.
Seguridad Social trata de mejorar la recuperación
Por otro lado, la Seguridad Social también ha llevado a cabo cambios en cuanto a la gestión de la baja laboral. Los trabajadores que soliciten una incapacidad temporal, tendrán que acudir a las revisiones que sean citadas durante el tiempo oportuno.
Y es que ahora los médicos contarán con la potestad de, si lo ven oportuno, adelantar las revisiones médicas a los trabajadores que estén de baja. De este modo, además de que el periodo de baja se puede acortar, la dolencia médica del trabajador estará más controlada, lo cual es una buena noticia.
El tiempo máximo que una persona puede estar de baja laboral son 12 meses. Es decir, cada trabajador puede acogerse a un año como máximo a la incapacidad temporal, si así lo indican los facultativos médicos.
No obstante, en caso de que el trabajador no se recupere, esta situación se puede alargar hasta en dos años. Existe una prórroga de 180 días si pasados los 12 meses el trabajador no se ha recuperado. Asimismo, también se pueden acoger al retraso en la calificación, que puede durar otros seis meses.