Imagínate recibir un suplemento en tu pensión de 500 euros al mes, con el fin de hacer frente a los costes del día a día. Bien, pues existe una ayuda que puede aliviar tu economía, claro, como cualquier otra cosa de este mundo, también tiene sus triquiñuelas y sus condiciones.
El complemento para el alquiler de vivienda ya hace tiempo que es de pública notoriedad. De hecho, se creó en 2012, para ayudar a las personas que viven de una pensión no contributiva y que deben pagar el alquiler, porque el alquiler de los pisos no ha parado de crecer en los últimos tiempos y, al día de hoy, pagar un alquiler puede ser toda una proeza.
El lado positivo de la historia es que el complemento de la pensión sigue vigente, así que aunque sea una ayuda que no te saque las castañas del fuego, los 500 euros añadiendo la pensión, no viene mal para ir saliendo adelante con los pagos del alquiler.
¿Qué es exactamente esta ayuda?
El complemento de la pensión fue puesto en marcha por el gobierno en 2012, época del Mariano Rajoy, para mantener una prestación cuya existencia había sido establecida antes de la llegada del PP al poder. En ese momento se fijó en 525 euros al año, que no son muchos, pero se suma al total de la pensión, así que poco a poco va sumando. Eso sí, también hay que decir que, como suele pasar con muchas de estas prestaciones, la cantidad quedo anclado en el tiempo y no se ha actualizado en todo este tiempo, lamentablemente, por un lado, el alquiler ha ido subiendo a un ritmo mucho más apresurado.
El importe del complemento de la pensión se recibe de golpe, por tanto, no se ve cada mes de la pensión, es un único bocado en un periodo del año. A fin de que tengas una idea, si cumples con los requisitos podrías llegar a percibir alrededor de unos 43 euros al mes, aunque te lo paguen todo de una sola vez.
Qué pensionistas pueden solicitarlo
Este complemento está dirigido a aquellas personas que perciban una pensión no contributiva, una pensión de jubilación o una pensión por invalidez. Además, tienes que residir en un domicilio alquilado y no ser propietario de ningún domicilio. En otras palabras, si no has cotizado lo suficiente para acceder a una pensión contributiva, esta ayuda puede servirte como pequeño salvavidas personal, a pesar de la larga lista de irreversibles problemas que causa el hecho de no tener una pensión contributiva y por ende estar sometido a las reglas de esta ayuda. Lo malo es que, a pesar del aumento del coste de vida, esta ayuda sigue la misma desde hace 12 años.
Por otra parte, el precio del alquiler ha ido escalando a un ritmo mucho más rápido. Concretamente, en 2012 ya podíamos hablar de un precio medio de alquiler de un piso en España de aproximadamente unos 7,9 euros por metro cuadrado. Hoy, a la hora de hacer este vídeo donde estamos en 2024, ya hablaríamos de unos 13,1 euros por metro cuadrado. Eso significa que el alquiler de un piso de unos 80 metros cuadrados ha pasado de costar unos 632 euros al mes a más de 1.000 euros al mes.
Cómo se solicita junto a la pensión
En primer lugar, primero debes comprobar que cumples con todos y cada uno de los requisitos: una pensión no contributiva, vivir de alquiler y no ser propietario de un domicilio. Si esto te encaja entonces el siguiente paso es dirigirte al Instituto de Mayores y Servicios Sociales (IMSERSO) o a los servicios sociales de tu comunidad autónoma.
Ellos tienen la responsabilidad de gestionar esta ayuda. Hay que tener en cuenta que, como muchas de estas ayudas, es posible que no sea una ayuda que esté en boca de todos o que no toda la gente sepa que la puede pedir. Así que, si conocéis a gente que se encuentre en similares circunstancias, no dudéis en hacérselo saber.
En definitiva, 500 euros no os quitarán todos los problemas, pero toda ayuda es siempre bienvenida. Y, además, en estos tiempos que corren en los que los precios del alquiler siguen subiendo, cualquier ayuda o respiro que se ofrezca se acepta muy bien.