Las pensiones por viudedad van a dar un salto histórico en el año 2025, y experimentará un aumento que va a colocar, por primera vez, a la media de dichas prestaciones por encima de los 900 euros mensuales. Las proyecciones señalan una subida del 2,8% en su revalorización anual.
Este hecho conlleva mejoras económicas para millones de personas afortunadas en España, que van a ver cómo su paga se va ajustando a un coste de la vida que tiende a crecer.
¿Aumento de la pensión? La media pasará de 898 a 923 euros
Si las estimaciones de la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) se sostienen, la pensión media por viudedad en 2025 va a pasar de los actuales 898 euros hasta unos 923 euros mensuales.
Este aumento de 25 euros ejecuta un gran alivio para muchos hogares en los que dicha pensión significa su única fuente de ingresos. Actualmente, el sistema público de la Seguridad Social paga 2,35 millones de pensiones por viudedad, repartidas en diferentes regímenes tales como el general, los trabajadores autónomos o en otros sectores como el mar y la minería del carbón. Entre estos regímenes, el régimen general cubre prácticamente el 75% del total de las pensiones por viudedad, es decir, alrededor de 1,75 millones de pensiones.
Los beneficiarios del régimen general, por otra parte, reciben de medio una pensión por viudedad más alta que el promedio: en torno a 954,80 euros. Con el ajuste del 2,8%, dicha pensión se va a elevar a 981,50 euros. Las pensiones en Euskadi: un paso adelante En el País Vasco, las cifras de las pensiones por viudedad son notablemente más altas que la media nacional. En él se contabilizan 133.602 beneficiarios cuya prestación media está en 1.089,20 euros, que pasaría a ser de 1.119,70 euros el próximo año.
El aumento es considerablemente más elevado en aquellos beneficiarios del régimen general de la Seguridad Social de Euskadi (77% de las pensiones de viudedad), para los cuales, de las 103.566 pensiones de viudedad, el valor medio es de 1.164,20 euros, que alcanzará la cifra de 1.196,80 euros con la actualización conforme a lo previsto. Esta diferencia, que se produce en el País Vasco, se traduce en una cierta mejora en la situación socio-económica para los beneficiarios de la pensión de viudedad, que se ven afectados por el hecho de que el País Vasco tiene un coste de vida superior a otras áreas de España.
La pensión mínima de viudedad también aumenta
El incremento de 2025 no solo se enfocará en las pensiones medias y altas, sino que también alcanza a las pensiones mínimas de viudedad. Este ajuste es el resultado del IPC del año anterior, según una fórmula que ya se aplicó a partir del 2022 y que ha permitido elaborar una medida de protección de los pensionistas llevada a cabo a partir del incremento del coste de vida.
Sin embargo, la estimación de la subida de las mínimas será de un incremento por encima del 2,8%, debido a la elaboración de una reforma que modificará las pensiones mínimas según un criterio evolutivo que va en función de la línea de pobreza. Las pensiones mínimas de viudedad también se aplicarán en función de la situación de cada beneficiario, de modo que, si estos tienen familiares a su cuidado, o bien tienen ingresos limitados, recibirán la misma.
Desde este último año, la instrucción es clara: ningún pensionista puede cobrar menos que la línea de pobreza que se aplica a una familia de la situación anterior (dos adultos), de forma que dicha garantía deberá estar completamente implantada para el 2027.