La pensión de jubilación es el pago mensual que la Seguridad Social establece de forma vitalicia a la persona que se termina su vida laboral. No existe una cuantía fija establecida, sino que esta depende de unos parámetros que fluctúan en base a la edad de la persona y los años que haya cotizado, parámetros que sí están establecidos.
La reforma de las pensiones de 2013, ha provocado que los requisitos para solicitar la pensión de jubilación accediendo al 100 por cien de la prestación, cada vez sea más complicado. De hecho, en la actualidad, si no has cotizado al menos 37 años y nueve meses, no te puedes retirar con 65 años. Si has cotizado menos, debes esperar hasta cumplir los 66 años y cuatro meses.
Esta medida se ha materializado porque para el Gobierno, es más beneficioso que los españoles se jubilen y por tanto, pasen a formar parte del sistema público de prestaciones lo más tarde posible. Por este motivo, también tiene disponibles diferentes ventajas e incentivos para compensar a aquellos trabajadores que decidan retrasar su jubilación.
Lo que se conoce como jubilación demorada, es un ejemplo de ello. A las personas que se acogen a este modelo de jubilación, la Seguridad Social le concede un complemento económico al comenzar a cobrar la prestación pública. Así que, esta opción es ideal especialmente, para quienes acumulan bastantes años cotizados.
Complemento en la pensión por jubilación demorada
La jubilación demorada está dirigida a aquellos trabajadores tanto por cuenta propia como ajena, que hayan cumplido la edad ordinaria de jubilación. Es decir, que ya reúnan los requisitos de edad para cobrar el cien por cien de la pensión. Por otra parte, no deben haber cumplido los 70 años. Por lo tanto, sus beneficiarios pueden ser personas entre los 65 y los 70 años, dependiendo de los años cotizados de cada uno.
Además de los requisitos anteriormente descritos, los solicitantes interesados en esta demora, no pueden haberse acogido a otras modalidades como la activa, flexible, parcial y anticipada. Por último, quedan excluidos de igual modo, aquellos que cobren la pensión máxima de jubilación. Pues no está permitido incrementar la cuantía a través de la jubilación demorada.
Fórmula para aplicar el aumento
La jubilación demorada ofrece dos fórmulas para acogerse y adquirir el complemento en la pensión. En primer lugar, se puede elegir disfrutar de la suma de un porcentaje del 4 por ciento adicional por cada año extra cotizado, después de cumplir la edad ordinaria de jubilación. Esto supondrá, un incremento en el importe de la prestación recibida.
Otra opción es obtener en el momento de la jubilación, una cantidad de dinero a tanto alzado por año cotizado. El montante en cualquier caso, puede oscilar entre los 5.000 y los 12.000 euros. Hasta hace tan solo unos meses, los beneficiarios debían elegir entre una de las dos opciones. Sin embargo, ahora cuentan con la posibilidad de combinar los dos incentivos.
Esta opción combinada es posible desde que el Gobierno aprobara un Real Decreto que lo permite. Por tanto, los trabajadores que retrasen su jubilación hasta 10 años, podrán incrementar su pensión hasta un 2 por ciento por cada año extra trabajado. Del mismo modo, cobrarán un único pago con la mitad de lo que les correspondería si hubiesen elegido solo la cantidad a tanto alzado.