Una pensión es fundamental para todo aquel que no cuenta ya con los recursos suficientes para poder trabajar y acceder a un salario. Esto puede llegar por la jubilación, es decir, porque se haya alcanzado la edad legal para retirarse y dejar de trabajar; por una incapacidad permanente, esto es, porque la Seguridad Social haya determinado que el trabajador ha perdido su capacidad para trabajar a causa de una dolencia; por estar involuntariamente en situación de desempleo, en este caso, porque la persona ha perdido su trabajo.
Sin embargo, existe un gran vacío en torno a las personas que tuvieron que dejar de trabajar para hacerse cargo del peso de llevar una casa, y de cuidar a familiares como padres o hijos. Son las personas que a las que se les denomina como amas de casa. Un perfil en su mayoría mujeres, que a lo largo de los años han visto como debían renunciar a sus aspiraciones profesionales, para dedicarse al trabajo del hogar.
Pensión de 500 euros para las amas de casa
Es de justicia que las denominadas amas de casa, tengan derecho a una pensión. Pues durante años, han sido las personas que han trabajado llevando todo el peso que supone un hogar, sin horario, sin remuneración, y sin ningún tipo de derechos laborales. Una discriminación latente que se agranda más aún al llegar a la tercera edad: Pues no, no solo no cuentan con una pensión de jubilación por no haber cotizado, sino que siguen llevando a cabo su trabajo.
Esta labor, que además ha estado no solo invisibilizada sino menospreciada durante años, ha conseguido ahora que se le recompense al llegar a la edad de jubilación. Y es que a pesar de que en la actualidad son menos las mujeres que renuncian a su carrera profesional para quedarse trabajando llevando el peso del hogar, a pesar también de que este peso cada vez se divide más, aún la desigualdad es aplastante, y siguen habiendo un gran número de mujeres que cogen este rol.
Es por ello, que el Gobierno de España ha puesto en marcha una pensión no contributiva de 500 euros para todas aquellas personas que han pasado toda su vida trabajando en el hogar, y han llegado a la edad de jubilación. Una gratificación que aunque mínima para el trabajo desarrollado a lo largo de los años, es al menos una pequeña ayuda que no las deja desprotegidas del todo. En este caso, será el Instituto de Mayores y Servicios Sociales, conocido como IMSERSO, el que se encargue de su gestión.
Requisitos para acceder a esta prestación
Como hemos adelantado, esta pensión no contributiva dirigida a las personas que han dedicado su vida a sacar su hogar adelante, es decir, amas de casa, está gestionada por el IMSERSO. Este organismo será el encargado de tramitar las ayudas y comprobar que sus solicitantes, cuentan con los requisitos suficientes para acceder a este dinero.
Cabe recordar, que se trata de una pensión de 500 euros al mes, y que para poder acceder a ella, el solicitante debe cumplir con los siguientes requisitos que deberá acreditar ante el Instituto de Mayores y Servicios Sociales (IMSERSO):
- Tener al menos 65 años.
- Residir en España y haberlo hecho durante un período de 10 años, en el período que media entre la fecha de cumplimiento de los 16 años y la de devengo de la pensión, de los cuales dos han de ser consecutivos e inmediatamente anteriores a la fecha de la solicitud.
- Que exista carencia cuando las rentas o ingresos personales de que se disponga, en cómputo anual para 2024, sean inferiores a 7.250,60 euros anuales.