En España, alcanzar la pensión máxima de jubilación es un objetivo ambicioso que requiere cumplir con requisitos específicos, tanto en términos de años de cotización como de ingresos.
Para este año, la cifra que garantiza la pensión máxima de 3.175,04 euros mensuales en 14 pagas, lo que se traduce en 44.450,56 euros anuales, se encuentra fuera del alcance de muchos trabajadores.
Requisitos para la pensión máxima
El primer requisito fundamental es haber cotizado al menos 37 años y 6 meses, aunque este período mínimo se incrementará progresivamente hasta 38 años y 6 meses en 2027. Sin embargo, cumplir solo con este requisito no garantiza la pensión máxima. Es imprescindible tener un salario elevado durante un largo período, especialmente en los últimos 25 años antes de la jubilación.
El salario neto mensual necesario para optar a la pensión máxima se sitúa en 3.704,22 euros, mientras que la base de cotización máxima, que es la referencia para calcular las aportaciones a la Seguridad Social, es de 4.720,56 euros mensuales. Esto significa que el trabajador debe haber estado cotizando por el máximo durante gran parte de su vida laboral para alcanzar el umbral que permite acceder a la pensión más alta posible.
Las pensiones en España
A pesar del deseo generalizado de obtener la pensión máxima, la realidad es que solo un pequeño porcentaje de pensionistas la reciben. Según datos oficiales, de los casi 10 millones de pensionistas en España, solo 373.527 personas perciben la pensión máxima, lo que representa aproximadamente el 6% del total de jubilados. Además, esta cifra está marcada por una clara desigualdad de género, ya que el 80% de quienes reciben la pensión máxima son hombres. Esta disparidad se explica, en gran medida, por la incorporación tardía de las mujeres al mercado laboral y las brechas salariales históricas.
La pensión media en España se sitúa en 1.252,30 euros mensuales, muy por debajo del máximo. Los autónomos, en particular, perciben una media aún menor, de 962,80 euros al mes. Estos datos reflejan la dificultad que enfrentan la mayoría de los trabajadores para alcanzar la pensión máxima, dado que solo una minoría logra cotizar por las bases más altas del sistema.
Evolución de las pensiones
El aumento de la pensión máxima en 2024, que supone un incremento de 116 euros mensuales respecto al año anterior, subraya el esfuerzo por mantener el poder adquisitivo de los pensionistas frente a la inflación y otros factores económicos. Esta tendencia al alza también se refleja en las pensiones no contributivas, destinadas a quienes no han podido cumplir con los requisitos de cotización mínimos. Este año, el importe máximo anual de estas pensiones será de 7.250,60 euros, equivalente a 517,90 euros mensuales.
Para quienes reciben una pensión no contributiva por invalidez con un grado de discapacidad igual o superior al 75% y que requieren la ayuda de otra persona, el complemento del 50% eleva la prestación a 776,85 euros mensuales. Aunque esta cifra es significativamente inferior a la pensión máxima contributiva, representa un apoyo vital para los pensionistas en situación de vulnerabilidad.
Por tanto, obtener la pensión máxima en España es un reto que exige una vida laboral con salarios elevados y una cotización constante y prolongada. Este logro es accesible solo para aquellos que han logrado mantenerse en la cima de las bases de cotización durante al menos 25 años antes de su jubilación. En un país donde la pensión media está lejos de alcanzar el tope máximo, la aspiración a esta cuantía sigue siendo un privilegio reservado a unos pocos.