Inditex ha alcanzado un acuerdo con Comisiones Obreras para implementar la reducción, de forma progresiva, de la jornada laboral de sus empleados, sin que se vea afectado el salario. Este cambio, que entrará en vigor a partir de 2025, sitúa a la multinacional gallega a la vanguardia de las reformas laborales en el país, adelantándose incluso a las propuestas del gobierno para disminuir la jornada semanal a 37,5 horas.
El acuerdo firmado por Inditex marca un hito significativo, aunque su alcance inicial estará limitado a una parte específica de su plantilla. La reducción de la jornada beneficiará exclusivamente a aquellos empleados mayores de 55 años que cuenten con más de diez años de antigüedad en la empresa.
Estos trabajadores, que representan a un grupo reducido dentro de la compañía, serán los primeros en disfrutar de una reducción de horas anuales, que variará según la edad y la jornada semanal de cada individuo.
Inditex se compromete con el bienestar de los empleados
Con este movimiento, Inditex no solo responde a las crecientes demandas de mejorar las condiciones laborales, sino que también refuerza su compromiso con el bienestar de sus empleados, especialmente aquellos que han dedicado gran parte de su vida profesional a la empresa. Esta medida, aunque no universal, refleja un avance en la flexibilidad laboral y el cuidado de la salud y el equilibrio entre la vida laboral y personal, aspectos cada vez más valorados en el entorno corporativo actual.
La estructura del acuerdo establece que los empleados de 55 años que trabajen más de 20 horas semanales verán reducida su jornada en 60 horas al año, mientras que aquellos con jornadas inferiores recibirán una reducción de 30 horas anuales. A medida que los trabajadores envejezcan, la disminución de horas será mayor, alcanzando un máximo de 284 horas anuales para quienes tengan 67 años y trabajen más de 20 horas por semana.
Ajustes futuros
Es importante destacar que este acuerdo surge en un contexto en el que la edad promedio de los empleados de Inditex ronda los 30,6 años, según el informe anual de 2023. Por lo tanto, aunque la medida tiene un impacto directo en una fracción limitada de la plantilla, sienta un precedente para posibles ajustes futuros que podrían beneficiar a un mayor número de trabajadores a medida que la empresa evolucione y adopte nuevas políticas laborales.
Este avance contrasta con la postura general de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), que ha mostrado resistencia a la reducción de la jornada laboral sin una compensación adecuada en la contratación. La patronal argumenta que tal cambio podría incrementar significativamente los costos empresariales, especialmente en sectores que dependen intensamente de la mano de obra, como el comercio y la distribución.
Sin embargo, la decisión de Inditex de avanzar con esta medida refleja un cambio en las dinámicas laborales dentro de la compañía y podría influir en otros actores del sector a seguir su ejemplo. La reducción de la jornada laboral es una cuestión que ha ganado relevancia en los debates sobre el futuro del trabajo, y este paso por parte de Inditex podría presagiar un cambio más amplio en la forma en que las empresas españolas gestionan el tiempo de trabajo de sus empleados.
A medida que se aproxima la fecha de implementación, la atención estará puesta en cómo esta medida afecta a la productividad y satisfacción laboral dentro de Inditex, y si otras grandes empresas seguirán su ejemplo en un futuro cercano. Lo que está claro es que la multinacional gallega ha tomado la delantera en una reforma que promete redefinir el panorama laboral en España.
