Las pensiones por discapacidad son un derecho esencial para muchas personas en España que sufren de enfermedades que les impiden trabajar. Saber si uno es elegible para esta prestación puede marcar una gran diferencia en la calidad de vida de los afectados.
Por eso es importante conocer qué enfermedades podrían permitirte acceder a una pensión por discapacidad y las opciones que tienen las personas para poder solicitarla esta ayuda.
Es primer lugar es muy importante entender cuál es la diferencia entre incapacidad y discapacidad. La incapacidad permanente afecta a aquellas personas que han sufrido una lesión o enfermedad que les impide realizar sus funciones laborales. En 2023, más de 13.000 personas en España fueron afectadas por este tipo de incapacidad. Por otro lado, la discapacidad se refiere a una deficiencia física o psíquica que impacta la vida diaria de la persona.
La Seguridad Social clasifica la incapacidad permanente en cuatro grados: parcial, total, absoluta y gran invalidez. El grado de incapacidad será determinado por el «Equipo de Valoración de Incapacidades«, conocido también como el «Tribunal Médico«, conforme al Real Decreto 1300/1995. Estos grados van a depender del tipo y severidad de la discapacidad que padece la persona.
Enfermedades que permiten acceder a una pensión por discapacidad
Aunque no existe una lista oficial de patologías que de acceso directo a una pensión por discapacidad, se puede determinar que hay alrededor de 42 enfermedades que pueden permitir el acceso directo a esta prestación si el tribunal dictamina una discapacidad de más del 33%. Estas enfermedades incluyen:
- Agorafobia
- Alzheimer
- Artritis Reumatoide
- Aniridia
- Ataxia
- Artrosis cervical
- Cáncer
- Cardiopatía isquémica
- Condromalacia rotuliana
- Diabetes
- Distimia
- Distrofia de conos
- Enfermedad de Behçet
- Enfermedades hepáticas
- Epilepsia
- EPOC
- Esclerosis múltiple
- Espondilitis anquilosante
- Espondilosis degenerativa
- Esquizofrenia
- Fibromialgia
- Fibrosis quística
- Hernia discal
- Lesión medular
- Lumbalgia crónica
- Lupus
- Maculopatía
- Miopía Magna
- Bipolaridad
- Narcolepsia
- Neuropatía
- Párkinson
- Postpolio
- Rizartrosis
- Síndrome de Marfan
- Síndrome de Ménière
- Síndrome de Tourette
- Síndrome Subacromial
- Síndrome de Südeck
- Enfermedad de Stargardt
Cómo solicitar la pensión por discapacidad
Para poder solicitar una pensión por discapacidad, las personas afectadas deben acudir a la dirección provincial del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) o del Instituto Social de la Marina. Es muy importante presentar los siguientes documentos:
- DNI o permiso de residencia.
- Documentos que reflejen la situación laboral en el momento de la solicitud.
- Fotocopia compulsada del Certificado de Discapacidad.
Para aquellos que vivan en el extranjero, la solicitud se debe realizar en la dirección provincial del Instituto Nacional de la Seguridad Social de la provincia donde se acrediten las últimas cotizaciones en España.
Las pensiones por discapacidad están diseñadas para evitar agravar la situación de vulnerabilidad de las personas afectadas. Al proporcionar un apoyo financiero, estas prestaciones ayudan a los individuos a mantener una calidad de vida digna y a enfrentar los desafíos diarios que acompañan a una discapacidad.
Por tanto, si sufres de alguna de las enfermedades mencionadas y te encuentras incapacitado para trabajar, es fundamental que recopiles información y solicites la pensión por discapacidad. Este apoyo puede resultar crucial para tu bienestar y el de tu familia.