La reciente actualización de las tablas de retenciones para el año 2024 por parte de Hacienda, impulsada por el aumento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) a 1.134 euros al mes, ofrece un vistazo a la maquinaria fiscal que opera a nivel gubernamental.
El sistema tributario en España, particularmente el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), revela una complicada red de retenciones y escalas progresivas que impactan de manera directa en el bolsillo de los contribuyentes.
El Gobierno ha elevado el mínimo exento del IRPF hasta los 15.876 euros brutos al año, alineándolo con el nuevo Salario Mínimo Interprofesional. Esta modificación busca eximir a los trabajadores que perciben ingresos hasta este umbral de las retenciones por el IRPF en sus nóminas. No obstante, tras el anuncio, surge la realidad de la carga fiscal que enfrenta la mayoría de los contribuyentes.
El IRPF se estructura en tramos y retenciones, siendo un tributo que grava la renta anual de los ciudadanos en función de sus circunstancias personales y familiares. La renta general, que incluye sueldos y prestaciones, sigue una escala progresiva con tramos impositivos. La aplicación de porcentajes crecientes no se realiza sobre la totalidad de los ingresos, sino de manera escalonada.
La subida de Hacienda que que afecta al salario medio
La tabla de retenciones de IRPF para 2024 muestra cómo Hacienda se apropia del 30% de los ingresos a partir de 20.200 euros al año, aumentando progresivamente hasta alcanzar el 47% para aquellos que ganan más de 300.000 euros. Esta progresión revela que, a medida que los ingresos aumentan, la porción destinada al pago de impuestos se incrementa notablemente.
Así quedan los tramos de IRPF para el año 2024, que se aplican para la declaración del 2023 son los siguientes:
- Desde 0 hasta 12.450 euros: retención del 19%.
- Desde 12.450 hasta 20.199 euros: retención del 24%.
- Desde 20.200 hasta 35.199 euros: retención del 30%.
- Desde 35.200 hasta 59.999 euros: retención del 37%.
- Desde 60.000 hasta 299.999 euros: retención del 45%.
- Más de 300.000 euros: retención del 47%.
Es fundamental comprender el papel de las retenciones, un mecanismo que anticipa el pago del IRPF mes a mes, para suavizar el impacto fiscal en los trabajadores. La mayoría de los contribuyentes no percibe completamente la carga tributaria, ya que las retenciones automáticas aplicadas por la Agencia Tributaria son deducidas directamente de las nóminas. Este adelanto mensual busca que el contribuyente no experimente de manera abrupta el monto total que deberá abonar en su declaración anual de la renta.
Las retenciones, obligatorias para las empresas, se calculan considerando diversas variables como salario, grado de discapacidad, duración del contrato y situación familiar. A pesar de su propósito de aproximarse al pago final, estas retenciones no siempre coinciden, dando lugar a declaraciones anuales que pueden resultar en pagos adicionales o devoluciones, dependiendo de la diferencia entre la retención mensual y el impuesto real adeudado.
En última instancia, las retenciones de IRPF actúan como un componente crucial en el sistema tributario español, facilitando la recaudación de impuestos de manera gradual y menos perceptible para los contribuyentes. La complejidad de este entramado fiscal destaca la importancia de una comprensión detallada por parte de los ciudadanos, quienes deben anticipar mensualmente parte de sus ingresos para hacer frente a sus obligaciones tributarias.