Por todos es conocida la pasión de algunas personas por la colección de monedas, una afición que puede alcanzar valores asombrosos tanto para quien colecciona como para la persona que vende.
Las pesetas convivieron con nosotros durante 133 años y han sido parte de algunos de los grandes hitos históricos de España de tal forma que para algunos expertos en numismática estas piezas guardan un gran valor. Según los datos definitivos publicados por el Banco de España, se han quedado sin canjear un total de 262.057 millones de pesetas.
Algunas de estas piezas se han convertido en auténticos objetos de coleccionista, llegando incluso a alcanzar valores por importe de 250.000 euros, pero no todas pueden aportarnos ese beneficio. El precio de estas monedas depende de varios factores, como que sean ejemplares atractivos, el año de acuñación, que mantengan un buen estado de conservación y no presenten desperfectos por el paso del tiempo.
La moneda de 25 pesetas
El último caso es una moneda de 25 pesetas, con agujero, por la que se puede llegar a pagar hasta 100 euros en las subastas numismáticas. Es una moneda que pertenece a Castilla y León y debido a un fallo de fabricación la hace única.
El error que hace que sea un elemento apreciado por los coleccionistas es debido a que en el reverso de la moneda aparezca «Castilla León» sin contar con la presencia de la «y». Estas monedas fueron retiradas de la circulación del mercado, quedando pocos ejemplares y siendo difíciles de encontrar, por lo que su precio puede superar los 100 euros.
Aquellas personas que conserven esta moneda pueden subastarla en portales online especializadas o recurrir a tiendas de antigüedades donde puedan tasar las monedas y buscar coleccionistas interesados. Hay foros como ‘Foronum’ o ‘Todo colección’ en los que se puede encontrar orientación sobre el valor de las monedas.
Otras monedas con alto valor en el mercado
Existen otros supuestos en los que una moneda puede multiplicar su valor con el paso del tiempo. Las pesetas con la imagen de Franco se han convertido en auténtica joyas numismáticas. Los coleccionistas han desembolsado hasta 36.000 euros por una moneda de 5 pesetas que data de 1949. Confiere un valor especial debido a su carga histórica Las monedas conmemorativas, son ediciones limitadas destinadas a la circulación y son de curso legal, pero terminan revalorizando su valor. El Banco Central Europeo, permite que cada país de la zona euro emita dos monedas conmemorativas al año, y de forma excepcional, se podrá emitir una tercera, siempre que se trate de una emisión conjunta que conmemore acontecimientos de importancia en el ámbito europeo.
Sin embargo, las monedas de colección van más allá del puro coleccionismo. Con ellas, se guarda un fragmento de historia y de los acontecimientos más representativos. No son monedas destinadas a la circulación, y normalmente, se acuñan en metales preciosos, con un valor nominal y diseño diferente a las destinadas a la circulación. La última moneda de colección emitida por la FNMT–RCM es la que celebra la mayoría de edad de Su Alteza Real la Princesa de Asturias en plata de ley, por un valor de 40€.