Alexa, el altavoz inteligente de Amazon, es uno de los dispositivos imprescindible en multitud de hogares de todo el mundo. Una de las claves de su alcance se debe a su versatilidad, ya que nos va a permitir realizar una gran variedad de tareas con solo pedírselo, desde reproducir música y controlar el hogar inteligente hasta obtener información y realizar compras. Sin embargo, no todo es positivo con estos altavoces inteligente, y ahora la OCU ha lanzado una importancia advertencia para todas aquellas personas que tengan el dispositivo en casa.
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha lanzado un aviso a todos los propietarios del asistente virtual de Amazon. Según la OCU, Alexa consume mucha cantidad de electricidad aunque esté en modo reposo, lo que puede suponer un gasto extra para los hogares.
Alexa está siempre enchufado
Alexa, al igual que otros altavoces inteligentes, está diseñado para estar siempre enchufados, para que pueda responder las solicitudes de los usuarios en cualquier momento. Esto quiere decir que, incluso cuando no se está usando, estos dispositivos siguen consumiendo una pequeña cantidad de electricidad.
Según la OCU, el consumo eléctrico de Alexa es de 26 kWh/año, el equivalente al consumo de una bombilla LED de 7W durante 24 horas al día. Esto coloca a Alexa en el segundo lugar del ranking de consumo eléctrico de los dispositivos domésticos, solo por detrás de la caldera de gas.
El gasto eléctrico de Alexa crece de forma significativa en hogares con varios dispositivos de este tipo. En este caso, el consumo podría llegar a los 100 kWh/año, lo que supone un gasto de unos 24 euros.
Recomendaciones para reducir el gasto Alexa
- Desactivar las compras por voz. Esta función nos permite hacer compras en línea con solo pedírselo. Sin embargo, es posible que se realicen compras accidentales, por lo que se recomienda desactivarla.
- Desactivar el modo de escucha continua. Esta función hace que Alexa pueda escuchar constantemente las conversaciones para aprender comandos de voz. Sin embargo, también consume más electricidad.
- Apagar el altavoz cuando no se esté utilizando. Será la forma más efectiva de reducir el gasto eléctrico de Alexa.
La OCU también advierte de los riesgos que implica para la seguridad los altavoces inteligentes. Estos dispositivos podrían registrar conversaciones privadas, que pueden ser utilizadas por terceros. Por ello, es importante configurar correctamente la privacidad de Alexa y utilizar contraseñas seguras.
Además de estas recomendaciones de la OCU, hay otros consejos que pueden ayudar a reducir el consumo eléctrico de Alexa:
- Coloca el altavoz en un lugar fresco y seco. Esto reduce el consumo de energía.
- Mantiene el altavoz actualizado. Las actualizaciones suelen incluir mejoras en la consumo de energía.
- Utiliza dispositivos de bajo consumo. Hay altavoces inteligentes que consumen menos energía que otros.
Siguiendo estos consejos, los usuarios de Alexa pueden reducir el impacto de estos dispositivos en el medio ambiente y ahorrar en su factura de la luz.
Por último cabe destacar que Alexa ha estado en el punto de mira en muchas ocasiones. Algunos bulos sobre el asistente de voz señalan que puede escuchar conversaciones privadas, espiar a los usuarios o controlar sus dispositivos sin su conocimiento. Sin embargo, estas afirmaciones no están respaldadas por pruebas.