La Seguridad Social ha dado a conocer los beneficios de los trabajadores que cotizan a tiempo parcial. Hace un año que las cotizaciones de estos trabajadores se equipararon con las cotizaciones de tiempo completo, una medida para mejorar el acceso a las prestaciones, incluyendo la pensión de jubilación.
El cambio quiere corregir las desigualdades y aumentar la protección para los empleados con contratos de jornada parcial. Hasta ahora, los trabajadores a tiempo parcial estaban en desventaja con los empleados a tiempo completo. La normativa ha supuesto un avance importante.
Cotizaciones a la Seguridad Social
Ahora, las cotizaciones a tiempo parcial cuentan como si fueran jornadas completas, un aspecto clave que va a determinar de forma directa en el derecho a prestaciones importantes.
Las principales prestaciones afectadas incluyen pensiones de jubilación, incapacidad permanente, viudedad y orfandad, así como las prestaciones por nacimiento y cuidado de menor. Estos derechos no solo se garantizan a quienes trabajan largas jornadas a tiempo parcial, sino también a aquellos con jornadas más reducidas. La nueva normativa pretende abarcar a todos los trabajadores en esta modalidad, sin importar el número de horas trabajadas, lo que supone un beneficio especialmente relevante para quienes tienen contratos con jornadas mínimas.
Uno de los objetivos principales es reducir la brecha de género en las pensiones, ya que una gran parte de las personas que trabajan a tiempo parcial son mujeres. Según datos de la Seguridad Social, de los casi tres millones de trabajadores que tienen un contrato a tiempo parcial, dos tercios son mujeres. Esta mayor equidad en la cotización permitirá a las trabajadoras acceder a mejores prestaciones en el futuro, minimizando las desigualdades que actualmente afectan sus pensiones de jubilación.
Una medida sin efecto retroactivo
Es importante subrayar que la aplicación de estas nuevas medidas no van a tener efectos retroactivos, por lo que no va a afectar a las personas que ya estén jubiladas. Sin embargo, los beneficios van a ser aplicables a todos los trabajadores que coticen bajo contratos a tiempo parcial y que aún no hayan accedido a la jubilación. Desde octubre de 2023, las cotizaciones a tiempo parcial ya cuentan para el cálculo de las futuras pensiones y prestaciones.
Si bien esta equiparación mejora el acceso a las prestaciones, no modifica el cálculo de las mismas. La cuantía de las pensiones va a seguir dependiendo de la base reguladora, es decir, lo que cada trabajador haya cotizado a lo largo de su vida laboral. Lo que sí cambia es el tiempo que se necesita para poder acceder a la prestación. Así, quienes cotizan a tiempo parcial podrán alcanzar los 15 años mínimos requeridos con mayor facilidad, ya que sus días de trabajo van a contar como días completos.
Este cambio es un paso importante hacia la igualdad de derechos laborales y de acceso a prestaciones en España. Con estas medidas, la Seguridad Social busca garantizar una mayor justicia social para los trabajadores a tiempo parcial, permitiéndoles disfrutar de las mismas condiciones que aquellos que trabajan a tiempo completo.