Si tienes deudas con Hacienda, ya sabrás que no vas a poder evitarla de ninguna manera. Pero lo que muchas personas no sabes es que hay una opción para solicitar un aplazamiento en el pago, pero para ello se deben cumplir con una serie de condiciones.
Cuando se tiene una deuda con Hacienda, comienza la preocupación por las sanciones y recargos. Si no se abona una deuda en el plazo establecido, Hacienda va a imponer recargos adicionales que harán más grande la deuda.
En el peor de los casos, Hacienda puede iniciar un proceso de embargo sobre los bienes de las personas endeudadas. Si no se paga una deuda dentro del periodo voluntario ni en el plazo concedido tras la notificación de apremio , se inicia la fase de embargo.
Cómo aplazar las deudas con Hacienda
Hacienda ofrece la posibilidad de aplazar o fraccionar las deudas en ciertos casos. Esta medida busca brindar un respiro a los contribuyentes que, por situaciones transitorias, no pueden asumir el pago completo de su deuda en los plazos estipulados.
Hacienda dice que “las deudas, tanto en periodo voluntario como ejecutivo, podrán aplazarse o fraccionarse en los términos que se fijen reglamentariamente, previa solicitud del obligado tributario, cuando su situación económico-financiera le impida, de forma transitoria, efectuar el pago en los plazos establecidos”.
Esto significa que si estás pasando por un mal momento financiero y no puedes pagar lo que debes, tienes la opción de solicitar un aplazamiento, siempre que tu situación sea transitoria y justificada. Hacienda examina cada caso de manera individual, lo que significa que no todos los deudores recibirán el mismo trato ni tendrán garantizado el aplazamiento.
Las deudas que pueden aplazarse
Es importante tener en cuenta que no todas las deudas con Hacienda se pueden aplazar. Por ejemplo, las deudas derivadas de delitos contra la Hacienda Pública, como el fraude fiscal, no pueden beneficiarse de esta opción. En estos casos, el pago debe realizarse en su totalidad y de manera inmediata, ya que la ley no contempla flexibilidad.
Por otro lado, las deudas ordinarias, como aquellas derivadas de la declaración de la renta o el IVA, sí pueden aplazarse, siempre que se cumplan los requisitos que establece la normativa. Cada solicitud es evaluada por la Agencia Tributaria, que valorará la situación económica del solicitante y la gravedad de su deuda antes de otorgar el aplazamiento.
Para solicitar el aplazamiento de una deuda con Hacienda, es imprescindible contar con un certificado electrónico, DNI electrónico o estar registrado en el sistema Cl@ve. Esta herramienta permite gestionar trámites de forma online y asegura la identidad del solicitante. La solicitud debe ir acompañada de una justificación clara de las dificultades económicas, lo que será evaluado por la Agencia Tributaria.
Por tanto, si tienes deudas con Hacienda y no puedes pagarlas, no todo está perdido. Existen mecanismos para aplazar o fraccionar el pago, lo que puede evitar sanciones y embargos. Eso sí, es fundamental cumplir con los requisitos y demostrar que la situación económica que atraviesas es transitoria.