El sector del automóvil es uno de los que más ha avanzado en los últimos tiempos, en lo que hay innovaciones se refiere. Los coches con motor eléctrico han tomado la alternativa entre el vanguardismo que nos permite aunar la mayor eficiencia en lo que a la estructura medioambiental se refiere sin perder ningún ápice del resto de características que se entiende que debe tener un automóvil. Sin embargo, parece que aún podemos ir más allá y la última de las novedades responde al motor eléctrico de rueda.
Alexander Burton, un estudiante procedente de Australia, creó un kit llamado a convertir coches térmicos en vehículos eléctricos e híbridos a partir de montar un motor en el rotor del freno de disco y a partir de ahí, aunque el origen no es el mismo, dos marcas punteras como BMW y la compañía de neumáticos Continental se han basado en un motor eléctrico, puesto en los bujes de las ruedas de los coches electrificados para dar una vuelta de tuerca más a la evolución en el sector del automóvil.
Si el invento que pensó Alexander Burton se basaba en las ruedas para hacer lo que se llama a un retro fit, en el caso de BMW y Continental, la apuesta se basa en una tecnología similar para las ruedas de los coches eléctricos, pero con un motor de doble rotor de flujo radial, que se coloca en los bujes de las ruedas y que ha sido creado por la compañía alemana, Deep Drive.
Con este tipo de tecnología, situada en las ruedas, podemos movilizar los vehículos de dos ruedas, como ciclomotores, motos, bicicletas o patinetes eléctricos, que nunca lo habíamos visto con coches de cuatro ruedas, hasta ahora.
La empresa que impulsa el motor de rueda
La Start Up alemana Deep Drive nació en la universidad de Munich con un proyecto que logró recaudar hasta 15 millones de euros en su ronda de inversión inicial con el apoyo de Bayern Kapital, UVC Partners y Peter Mertens, directivo de Audi. A día de hoy los que de alguna manera se sumará el proyecto son tanto BMW como Continental.
La tecnología patentada por Deep Drive permite lograr más potencia, en comparación con las convencionales, algo que se traduce en un 20% más de autonomía para los coches eléctricos que integran su motor de rueda o el contar con una batería un 20% más pequeña. Es, en definitiva, un sistema más barato, más eficiente en el uso de recursos y más ligero, según presume la Startup alemana.
«Nos impulsa la fusión. Nuestro viaje comenzó hace unos 10 años como parte de un equipo estudiantil de deportes de motor de Munich. Después de eso, el viaje continuó durante muchos años en la industria en empresas automotrices líderes. Ahora estamos desbloqueando radicalmente el potencial de la tecnología actual para la movilidad del mañana. Construir las mejores soluciones de tracción central y en las ruedas de su clase», analizan desde su página web, donde explican el por qué de la creación del motor de rueda, que ahora quieren BMW y Continental. «Creamos una arquitectura de motor completamente nueva para cambiar el mundo del automóvil de forma sostenible. Sin los viejos problemas. Sin campanas ni silbatos innecesarios».