H2X Global es una compañía que en tiempos pasados realizó una incursión en el mercado del automóvil con prototipos de diferentes vehículos de cuatro ruedas y alto volumen, caso de furgonetas, pick-ups y camiones movidos, que venían con una integración de una pila de combustible de hidrógeno. Esta joven empresa se hizo un hueco, no demasiado grande en el mercado, pero su reciente asociación con una marca cuya principal asociación se da con las motos, KTM, ha llevado a que continúe con el impulso y construcción de este tipo de automóviles.
Ha sido una asociación entre la joven H2X Global y KTM Technologies GmbH la que provoca que veamos a la compañía de origen austriaco cambiando de tercio y dejando, en cierta medida, de lado las motos para pasar a impulsar vehículos de cuatro ruedas con una pila de combustible de hidrógeno, de cara al futuro de este mercado.
La presentación de la unión entre las dos empresas ha derivado en una formación de su primer prototipo conjunto, que está impulsado por hidrógeno y cuenta con distintos estilos de carrocería. En un principio, el vehículo que presentan H2X Global y KTM Technologies GmbH llegará al mercado en formato de furgoneta, aunque tiempo después se espera que lo haga como taxi y furgón, según anuncian las compañías involucradas, que han trabajado en común para el desarrollo de carrocerías de vehículos más ligeros, cuya propulsión se de en gran medida por la denominación de cero emisiones.
KTM cambia las motos por las cero emisiones
Hasta la fecha, hemos conocido a la marca austriaca KTM de manera internacional por la producción de motos de todo tipo, llegando incluso a la competición tanto en rallys como el Dakar o en el campeonato del mundo de motociclismo. Sin embargo, también han desarrollado coches de alto rendimiento y ahora, de la mano de H2X Global, se lanzan al mundo de las furgonetas cero emisiones, un sistema que ha perfeccionado en los últimos tiempos su colaborador. La unión, según ha sido calificada por ambas compañías, está encaminada a “crear algo que podría ayudar a cambiar la industria de los vehículos comerciales”.
Las dos empresas, tal y como se publica en el portal CarBuzz, optaron por un cambio en el chasis que habían empleado hasta la fecha en su proyecto y pasar a otro nuevo, llamado Origami, de manera que pudieran favorecer la reducción de costes, al mismo tiempo que una adaptabilidad superior entre las variantes de carrocería. El resultado no debería ser otro que una producción más sostenible y una inversión bastante menor en el proceso.
El nuevo vehículo de KTM
KTM deja de lado las motos con este proyecto, de la mano de H2X Global y cuyo diseño está basado en las actuales Mercedes Sprinter, las furgonetas líderes del mercado, aunque en la variante taxi que vendrá más adelante, se ha hecho lo propio con la Volkswagen ID.Buzz. En la actualidad, el proceso gira alrededor de los últimos pasos del proceso de optimización para la fabricación en masa y mientras se está culminando el desarrollo de su principal punto mecánico, que no es otro que la pila de combustible de hidrógeno.