Un estudio realizado en Reino Unido ha revelado que las personas que viven de alquiler suelen envejecer más rápido que las que tienen en propiedad una vivienda. En concreto, cada siete años reales de vida, los inquilinos acumulan un año más de envejecimiento biológico, según os datos recogidos
El estudio ha sido publicado por la revista The Journal of Epidemiology & Community Health, y se basó en los datos de la encuesta Understanding Society, que sigue a más de 100.000 ciudadanos británicos durante años.
Los investigadores han analizado la información sobre la vivienda de todos los participantes, y eso incluye el tipo de propiedad que tienen, el precio del alquiler, el estado de la vivienda y la ubicación donde está situada. También han recopilado datos sobre el estado de salud que tienen los participantes, incluyendo su edad, sexo, nivel socioeconómico y los hábitos de vida que mantienen.
La incertidumbre del alquiler, clave en el estudio
Los resultados mostraron que aquellos inquilinos que tenían viviendas privadas envejecían más rápido que los propietarios y los inquilinos que tienen viviendas públicas. Este efecto fue más pronunciado en aquellos inquilinos que vivían en casas o apartamentos de mala calidad o que estaban preocupados por su situación de vivienda.
Los autores del estudio llegaron a la conclusión de que el estrés y la incertidumbre que pueden estar relacionados con el alquiler pueden contribuir a que se produzca un envejecimiento prematuro. El hecho de tener que estar preocupado por el pago del alquiler, por la posibilidad de poder ser desalojado o por tener que encontrar una nueva vivienda, podría ser el causante de sufrir un impacto negativo en la salud física y mental.
En nuestro país, el porcentaje de hogares que viven de alquiler es del 15,9%, según datos recogidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Este porcentaje es significativamente más bajo que en el Reino Unido, donde el 36% de los hogares son inquilinos.
El precio del alquiler sube en España
El precio del alquiler en nuestro país también es más bajo que en el Reino Unido. En septiembre de 2023, el precio medio del alquiler en España se situaba en los 952 euros, mientras que en el Reino Unido era de 1.480 euros.
Teniendo en cuenta estos factores, es probable que el envejecimiento prematuro sea un problema menor en nuestro país comparado con el Reino Unido. Sin embargo, es importante subrayar que el precio del alquiler en España ha aumentado de manera considerable en los últimos años, lo que podría derivar en un impacto negativo en la salud de los inquilinos.
Por tanto, el estudio británico sugiere que el alquiler podría ser un factor de envejecimiento prematuro. Este efecto es más pronunciado en los inquilinos que viven en viviendas de mala calidad o que están preocupados por su situación de vivienda y la incertidumbre sobre su futuro.
En España, el porcentaje de hogares que viven de alquiler es más bajos que en el Reino Unido, y el precio del alquiler también es más bajo. Sin embargo, el precio del alquiler sigue aumentado en los últimos años, lo que podría provocar un impacto negativo en la salud de los inquilinos.