La baja laboral, que es como una suspensión laboral, indica que el trabajador necesita un tiempo determinado para recuperar alguna insuficiencia o alguna enfermedad o condición médica que le impide cumplir con sus funciones.
No obstante, aunque puede sonar obvio, existen quienes incluso parecen olvidarse de que en estos períodos hay determinadas actividades prohibidas o, cómo al menos no recomendadas, ya que también podrían entorpecer el proceso de recuperación e incluso, en el peor de los casos, conducir a la posibilidad de dimitir.
Actividades que debes evitar durante una baja laboral
El otro día, una noticia de Canarias dejó claro que ser irresponsable en baja puede traer graves problemas. La despiden por subir a sus redes sociales una serie de videos donde aparece bailando en tacones. La mujer que se encuentra de baja por una operación de juanetes, incompatible con la recuperación. Además, también parece que era un tipo de comportamiento que podría alargar el tiempo fuera de la empresa. En conclusión, el Tribunal Superior de Justicia de Canarias, confirmó que el despido era procedente.
Este tipo de comportamientos abre el debate de qué se puede hacer cuando un trabajador está de baja. La realidad es que no hay un listado cerrado de actividades permitidas y de actividades prohibidas. Sino que la Seguridad Social parte de unos principios generales. Las actividades a desarrollar dependen en gran medida de la enfermedad; la regla es clara: realizar actividades que puedan entorpecer la recuperación puede interpretarse como una grave falta.
En el fondo, se recomienda no practicar deporte muy intensamente; no salir de fiesta; no realizar ejercicios con los que se puede perjudicar la lesión; y en muchos casos incluso viajar pues puede que no haya indicación médica adecuada.
Consecuencias de no respetar las condiciones
El despido es una posibilidad si la empresa concluye que el trabajador incumple con la necesidad de concretar el estado de baja. Es cierto que por ley el trabajador no puede ser despedido por el hecho de estar de baja. Pero cuando efectúa actuaciones que van en contra de su estado médico o cuando las circunstancias junto a su incapacidad muestran que regresaría a su puesto de trabajo antes de lo que realmente informa, es posible el despido.
Por poner un ejemplo, la realización de ejercicios físicos, bailar, ir a una cita con los amigos, etc. son acciones que el empresario puede interpretar como que el trabajador está listo para reincorporarse al trabajo, especialmente si la dolencia es física. En definitiva, la percepción de que puede existir un «fraude» laboral puede llevar a la empresa a tomar medidas drásticas y, en más de una ocasión, el Tribunal puede estar de parte del empresariado.
Normas claras sobre la baja laboral
Desde sindicatos como la Unión Sindical Obrera (USO) afirman que no se criminaliza a los trabajadores de baja, al mismo tiempo que recuerdan que no hay que generalizar el fraude. Pero la realidad es que existen normas claras y que esa responsabilidad recae sobre el trabajador. Concurriendo a su recuperación, ese trabajador encargará de no realizar acciones que le perjudiquen o que hagan inexorablemente más largo un estado de baja.
Las actividades que se pueden realizar dependen del tipo de lesión o de la patología a la que se refiere el trabajador. La regla fundamental es proceder con sentido común y priorizar la recuperación frente a todo. Las consecuencias de la no conducta pueden llegar a ser muy severas y llegar a situaciones irremediables: el despido. No solo eso, podría dañar la buena fe del trabajador respecto al empresario y la Administración Pública.