Un debate que se genera año tras año en la sociedad, está relacionado con el cambio horario en España. Como ocurre cada mes de octubre, dentro de poco tendremos otro cambio de hora en los relojes. La normativa europea exige a los países miembros que se ajusten a esta norma, con el objetivo de aprovechar al máximo las horas de luz.
El cambio al horario de invierno llegará el último domingo del mes, es decir, la madrugada del 26 al 27 de octubre de 2024. Este cambio de hora en los relojes de cada año está regulado en toda la Unión Europea, a través de la Directiva 2000/84/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 19 de enero de 2001.
¿Retrasar o adelantar el reloj con el cambio horario?
Una de las preguntas más comunes en la sociedad, es si tenemos que adelantar o retrasar los relojes una hora. Esto quiere decir que la madrugada del 26 al 27 de octubre, a las 3:00 de la madrugada se retrasan los relojes una hora, marcando las 2:00.
La mayoría de los relojes digitales en teléfonos móviles, televisión u otros aparatos electrónicos se modifican solos. No obstante, debemos poner atención a aquellos que todavía no funcionan de forma automática.
Además, también es importante que tengamos claro que, en esta ocasión, el cambio horario de invierno trae consigo un cambio en la rutina. Y es que cada día anochecerá antes, es decir, si ahora a las 8 está anocheciendo y poniéndose el sol, cuando cambien la hora será a las 7.
El cambio horario altera las rutinas diarias
Por norma general, los ciudadanos no suelen estar contentos con los cambios de hora. Cabe recordar que esta decisión no procede del Gobierno de España, sino que viene exigida por la Comisión Europea. Así, cada año todos los países deben ajustarse a la normativa.
El cambio horario conlleva un proceso de adaptación por parte de los ciudadanos, que en ocasiones tardan tiempo en ajustarse a las nuevas rutinas. Este mes cambiamos al horario de invierno, que conlleva realizar las actividad antes para que podamos hacerlas a la luz del día.
Además, el cambio de hora suele tener efectos negativos en el estado de ánimo y la energía, ya que para aprovechar el día debemos realizar las tareas por la mañana. En otras palabras, al tener menos horas de luz solar durante las tardes, los niveles de energía y el ciclo del sueño cambian.
En cualquier caso, el cambio horario tiene los días contados. Y es que la Unión Europea, según la Orden PCM/186/2022, ha comunicado que este proceso solo se llevará a cabo hasta el año 2026.