La vuelta al colegio se convierte en un reto tanto para los niños como para sus padres. Tras semanas de descanso y horarios relajados, el retorno a la rutina diaria exige planificación y adaptación.
Para facilitar este proceso, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha emitido una serie de recomendaciones clave.
Siguiendo estos consejos, las familias pueden lograr que el regreso a las aulas sea mucho más fluido, minimizando el estrés y los imprevistos que a menudo acompañan este momento del año.
Recomendaciones de la OCU para la vuelta al cole
Uno de los aspectos que más influyen en el éxito del regreso a las aulas es la gestión del tiempo. La OCU aconseja que los padres comiencen a reajustar los horarios de sus hijos días antes de que comience el curso. Durante las vacaciones, los niños suelen adquirir hábitos de sueño menos rígidos, y este cambio de ritmo puede dificultar su adaptación a la rutina escolar si no se maneja adecuadamente. Al adelantar la hora de ir a la cama y la de despertarse de manera progresiva, los pequeños tendrán más tiempo para readaptarse, evitando el cansancio que suele presentarse en los primeros días de clase.
Además de ajustar los horarios de sueño, es fundamental que las familias organicen las jornadas diarias con antelación. Esto incluye no solo las horas de colegio, sino también las actividades extracurriculares, la logística para los desplazamientos y los compromisos personales de los padres. Con una planificación adecuada, la vuelta al cole puede gestionarse de manera más eficiente, permitiendo un equilibrio entre las responsabilidades laborales, las actividades familiares y el tiempo personal.
Otro de los consejos que la OCU subraya es la importancia de no dejar la compra de materiales escolares para el último momento. El inicio de un nuevo curso implica una lista de útiles escolares, libros y, en muchos casos, uniformes. La organización recomienda revisar primero qué elementos del curso anterior pueden reutilizarse, lo cual no solo es una medida de ahorro económico, sino que también fomenta un enfoque más sostenible. A la hora de comprar nuevos materiales, etiquetarlos adecuadamente desde el principio ayudará a evitar pérdidas y mantener el orden.
Los estudios para el nuevo curso
Una vez organizado todo el material escolar, es importante establecer una rutina de estudio que sea adecuada para el nuevo curso. Crear un ambiente de estudio bien iluminado, libre de distracciones y con todo lo necesario al alcance es fundamental para que los niños se concentren. La vuelta a las clases también es un buen momento para reforzar la importancia de un buen uso de la tecnología, limitando el tiempo frente a pantallas y equilibrándolo con actividades que promuevan su desarrollo físico y emocional, como el ejercicio y el tiempo en familia.
Finalmente, la OCU recuerda que es esencial retomar las rutinas de manera gradual. No todos los niños se adaptan de la misma forma a los cambios, y para algunos, el inicio del curso puede generar ansiedad, especialmente si están enfrentando nuevos retos, como el cambio de colegio o de curso. Hablar con ellos sobre lo que pueden esperar, recordándoles los aspectos positivos, como el reencuentro con amigos y la oportunidad de aprender cosas nuevas, es una manera efectiva de suavizar esta transición. Durante las primeras semanas, es recomendable mantener un equilibrio entre las actividades escolares y el tiempo de ocio, para que la adaptación sea más llevadera y progresiva.