La incapacidad permanente en España se solicita a través de la Seguridad Social, que juega un papel muy importante a la hora de conceder a las personas que salgan, de alguna manera, victoriosas de su solicitud, una pensión que aporte cierta seguridad financiera para ellos. Los trabajadores que queden incapacitados por una lesión grave o enfermedades, de forma permanente, podrán recibir esta prestación, que en algunos casos es compatible con la actividad laboral.
Alrededor de un millón de beneficiarios se encuentran con la revelación de que la administración inicia el proceso de incapacidad permanente sin requerir una solicitud formal por parte del trabajador. Aunque este paso inicial no asegura la aprobación, marca el inicio del procedimiento respaldado por el Real Decreto Legislativo 8/2015, que insta a la Seguridad Social a tomar la iniciativa en la tramitación de la pensión de incapacidad permanente. De esta manera, podremos vernos implicados en el proceso de incapacidad permanente sin haberlo pedido.
En situaciones habituales, los trabajadores suelen recibir inicialmente una prestación por incapacidad temporal, una baja médica con una duración máxima de un año, ampliable hasta 540 días en casos de posibles mejorías. Si no se observa mejoría, la Seguridad Social activa automáticamente el proceso para otorgar la pensión de incapacidad.
El trabajador debe comparecer ante el tribunal médico para ser examinado y obtener un grado de discapacidad mínimo del 33%, seguido de la definición de la modalidad de incapacidad, como parcial, total, absoluta o Gran Invalidez. Este proceso, según el despacho Campmany Abogados, consta de diversas fases que abarcan aproximadamente 135 días por vía administrativa.
La carta inicial de la Seguridad Social notifica al trabajador sobre el inicio del proceso y contiene un formulario de solicitud de oficio. Este formulario puede ser aceptado o rechazado, y en caso de aceptación, el trabajador debe completarlo o presentar alegaciones. El tribunal médico lleva a cabo exámenes y entrevistas para evaluar la discapacidad, y finalmente, la aceptación o denegación de la pensión se determina a nivel local por el Director Provincial de la Seguridad Social. En situaciones de silencio administrativo después de 135 días, se presume que la pensión ha sido denegada.
Cómo solicitar la pensión de incapacidad permanente en España
Para realizar una solicitud de incapacidad permanente en España, el modus operandi para completarle será a través del Instituto Nacional de la Seguridad Social, el INSS. La mejor manera de completar la solicitud es la siguiente.
- Determinar la situación médica: antes de presentar la solicitud, asegúrate de que tu situación médica cumple con los requisitos para ser considerada como incapacidad permanente. Generalmente, esta condición implica una limitación significativa para realizar actividades laborales.
- Reúne la documentación necesaria: prepara toda la documentación médica que respalde tu solicitud, como informes médicos, pruebas diagnósticas, tratamientos y cualquier otro documento relevante.
- Cita con el médico del INSS: solicita una cita con el médico del INSS. Este paso es esencial, ya que el médico realizará una evaluación médica para determinar el grado de incapacidad. La cita puede solicitarse por teléfono o en persona en la oficina del INSS.
- Completa el formulario de solicitud: obtén el formulario de solicitud de incapacidad permanente en la página web del INSS o en sus oficinas. Completa el formulario con tus datos personales y la información médica necesaria.
- Presenta la solicitud: entrega el formulario de solicitud y la documentación médica en la oficina del INSS correspondiente a tu lugar de residencia
- Seguimiento y respuesta: después de presentar la solicitud, el INSS llevará a cabo una evaluación médica y administrativa. Pueden requerir información adicional o realizar más pruebas médicas si es necesario. Una vez completado el proceso, recibirás una notificación con la resolución sobre tu solicitud de incapacidad permanente.